miércoles, 1 de abril de 2020

EL CESTO DE LOS TESOROS

EL CESTO DE LOS TESOROS de Elinor Goldschmied.

Edad: bebés y 1-2 años

Objetivos: desarrollar la percepción sensorial, coordinar movimientos finos y gruesos, explorar y manipular de forma autónoma los objetos, desarrollar la atención y la concentración, desarrollar la creatividad observando y manejando estos objetos



Esta propuesta que os presentamos hoy va dirigida a los más pequeños de la casa!


Lo podemos realizar a partir, siempre aproximadamente, de los 6 meses hasta que empiezan a caminar y su interés se centra más en esta recién adquirida capacidad.

Éste será el momento de introducirles en  el juego heurístico, del que haremos otra entrada más adelante.

¿QUÉ NECESITAMOS?

Lo primero que tenemos que buscar es un cesto de mimbre circular y no demasiado alto, que facilite al niño/a el acceso al contenido, pues a tan corta edad, dependiendo del momento evolutivo en que se encuentre, deberán poder acceder al cesto tanto tumbados boca abajo como sentados.

MATERIALES PARA DESCUBRIR JUGANDO

Llenaremos nuestro cesto de materiales de la vida cotidiana. Debemos procurar que haya variedad en cuanto a la cualidad de los materiales que vamos a presentar: madera, metal, algodón, lana, fieltro, piel, vidrio grueso (como el de los botes de perfume)... que sean neutros (evitaremos los colores estridentes) y seguros, que permitan al niño/a explorar y descubrir, desarrollando su percepción sensorial:

El tacto: forma, textura, peso y temperatura.

El olor: variedad de olores.

El gusto: procurando que la variedad no sea limitada gracias a los distintos materiales.

El sonido: tintineo, percusión, fricción, crujido y ausencia de sonido.

La vista: color, dimensiones interesantes, forma, luminosidad, brillo.





Os dejamos unas cuantas ideas de materiales para usar, podéis ir renovándolos cada semana: 

Objetos de vidrio: frascos de perfume pequeños, tarros de mermelada o yogur pequeños, tarros de cosmética.

Objetos de papel y cartón: cajitas de cartón, tubos de cartón, libreta pequeña de espiral.

Objetos de piel, tela, goma, fieltro: monedero de piel, bolsa pequeña de piel, pelota de goma, pelota de cuero, tubo de goma, muñeca de trapo, pelota de tenis, golf, pádel, funda de gafas, bolsita hierbas aromáticas, anillas de goma cafetera, cremallera, cintas de texturas y colores variados, agarrador de cocina (de tela, de ganchillo).

Objetos de madera: cajas pequeñas, sonajeros, botones de colores ensartados en un hilo consistente, bol pequeño, mano de mortero.

Objetos de materiales naturales: ovillo de lana, cestos pequeños, cepillo de uñas de madera, brocha de afeitar, pincel o brocha, brocha de maquillaje, bolsa de rafia, pinza de la ropa, cucharón pequeño, cuchara de miel, bigudí, servilletero, espejo de maquillaje.

Objetos metálicos: cuchara de diversos tamaños, varilla, juego de llaves, flanera, latas sin bordes afilados ni ángulos puntiagudos, moldes de pasteles, colador de té, tapas de tarros, llavero.

¿CUÁL DEBE DE SER NUESTRO PAPEL COMO ADULTO?

Acompañaremos su juego con nuestra presencia y cercanía, dejándole explorar a su ritmo y respetaremos que chupe, golpee, vacíe el cesto, aparte lo que no le interesa en ese momento... El bebé de esta etapa explora mediante sus manos, sus dedos y  su boca. Es un juego no dirigido, en el que es importante evitar darle o acercarle nosotros los objetos, él o ella decidirá si quiere desplazarse a coger algo que se le ha alejado o si le interesa más una cuchara que un monedero... es parte del juego!

Tranquilamente y de vez en cuando, iremos volviendo a colocar todo de nuevo en el cesto, con lo que captaremos de nuevo el interés de nuestro bebé, y así hasta que se canse.

UN MUNDO DE EXPERIENCIAS Y SENSACIONES

A través del Cesto de los Tesoros, al bebé, aún limitado de movimiento, le estamos ofreciendo la oportunidad de que descubra el mundo que le rodea, de acercarle un mundo de texturas, tamaños, pesos, temperaturas muy diversas y que le permiten a su vez tener consciencia de su entorno. Fomentará también su capacidad de atención, su autonomía y su motricidad fina.


Bibliografía:
Elinor Goldschmied, Sonia Jackson. La educación infantil de los 0 a los 3 años. Ed. Morata


A continuación os adjuntamos un formulario para que nos contéis vuestra experiencia, gracias!

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